Como casi siempre el paralelismo con Pilar Jericó es innegable. Repasando sus últimos posts he leído uno muy ligado a mi estado de ánimo. El post de pilar habla de recuperar la ilusión como herramienta básica para ser feliz, de hecho su blog se llama Laboratorio de Felicidad.
Como hacía en mi primer y original blog, wififorall, voy a repasar el post de Pilar y comentar cosas que me gustan, me llaman la atención y cómo no … me hacen reflexionar.
Recuperar la ilusión
http://blogs.elpais.com/laboratorio-de-felicidad/2015/01/recuperar-la-ilusión-.html
Es un post escrito un día después de la fiesta de los reyes magos, fiesta ilusionan por antonomasia, tanto para pequeños como mayores. He de reconocer que, en este caso, mi ilusión sigue intacta, tanto de cuando actuaba como receptor o como últimamente como transmisor. Además los tres últimos años he incorporado algún donante más. todo y que ellas no se esperaban nada de mi…. lo hice con toda la ilusión del mundo…. sí de eso se trata de generar ilusión.
De sus primeros párrafos destaco la frase en negrita…
Es posible que las Navidades emocionen de un modo especial cuando tienes niños pequeños porque te conectan con una parte de tu propia infancia y con la ilusión que teníamos cuando esperábamos los regalos o cuando soñábamos con la magia. Pero más allá de esas fechas, es también posible que la ilusión sea una de las emociones que los adultos más necesitemos recuperar en nuestra vida.
Avanzando en el post, vuelvo a detectar cosa que me gustan….
A veces parece que estar ilusionado no tiene buena prensa. De hecho, hasta la propia palabra tiene una acepción negativa, como recoge la Real Academia de la Lengua, que la define como “un concepto, imagen o representación sin verdadera realidad”… El concepto iluso proviene de ahí. Sin embargo, la RAE también aporta una segunda acepción, como esperanza que nos resulta especialmente atractiva. Dicha esperanza está íntimamente relacionada con la felicidad.
Bueno este aspecto ya lo comenté en mi post sobre los sueños. Para mi soñar es tener ilusión, tener ilusión es tener esperanza… y como dice Pilar me atrae y me genera bienestar.
La materia de la ilusión es puramente emocional. Se escapa de explicaciones racionales o justificaciones de ningún tipo. Simplemente se está y esa sensación es de fuerza, una fuerza que es capaz de darnos argumentos más que sobrados para explorar aquello que nos ilusiona. La ilusión por sí sola no construye proyectos o relaciones o nuevas empresas o nos lleva a realizar ese viaje con el que soñamos, pero sí que es el motor para movernos a conseguirlo. Y es posible que lo que realmente nos envejezca, más allá de lo que diga nuestro DNI, sea la pérdida de la ilusión de lo que hacemos, lo que tenemos o lo que somos. Por ello, es una buena idea incluir la ilusión como una de las intenciones para alcanzar o mantener a lo largo de este año que comienza. ¿Y cómo recuperarla si sentimos que la hemos perdido en algún momento?
Bueno… esta reflexión también la comparto… y más aún lo del DNI. Ahora que se acerca mi aniversario mi estado de rebeldía hacía esa fecha me empuja a combatirla con fuerza, con ilusión. Tengo ideas, tengo proyectos, tan sólo, como he comentado más de una vez, debería de eliminar esa sensación de temporalidad en algunas aspectos de mi vida. La sensación de temporalidad que de forma curiosa se combina con un imparable paso del tiempo, a menudo me abruma y no me deja ilusionarme. He de reconocer que tengo alguna ilusión incumplida, de forma estructural, o de forma deficiente y que, a menudo, no me permite ilusionarme del todo. Esta es la promesa estrella, que cada enero y setiembre me hago y que aún sigo esperando que Gaspar, Melchor y Baltasar la haga realidad.Pero sigamos con el blog….
Como hemos dicho, es puramente emocional, por lo que tenemos que responder a una pregunta muy sencilla: ¿Qué es lo que realmente queremos, qué es lo que nos hace vibrar por dentro? Esa respuesta ha de ser pura, más allá de lo que podamos alcanzar con nuestros recursos o alejados de nuestros miedos. No hay que responder pensando a priori: “Total, si no lo voy a lograr…”. Respóndete a ti mismo con sinceridad. Luego, ya vendrán las estrategias para conseguirlo.
Bueno si de algo me caracterizo es por mi flexibilidad, perseverancia y persistencia para llevar a cabo mis ilusiones. De todas formas todo y que parezca fácil a menudo te invaden las dudas…. sobre si lo conseguirás o si te inmolarás durante el proceso.
¿ Seguimos con el post de Pilar? ….
La ilusión está íntimamente muy relacionada con la capacidad de sorprendernos. Recuerda por qué son tan emocionantes los Reyes Magos, porque llevan magia. Y dicha magia la podemos incorporar cada uno de nosotros en nuestra vida si somos capaces de asombrarnos con los ojos de un niño de todo cuanto somos y tenemos. La sensación de rutina, aburrimiento o hastío porque ya lo sabemos, es la antítesis a la ilusión y, por supuesto, a la felicidad. Tampoco se ha de centrar en los grandísimos proyectos, sino en cada uno de los pequeños pasos que logremos.
Esta frase me recuerda a algún comentario que me hizo Baldu, miedo a la monotonía, a lo mismo, a repetir patrones y al aburrimiento. Puede ser, quizás sea así, lo único que tengo claro es que durante este proceso he aprendido a valorar todo, lo bueno y lo malo, lo monótono y lo que te hace vibrar, que realmente la felicidad no depende de un estado “de tiempo”, si no del estado mental. Bendita rutina si es contigo¡¡¡¡¡¡ deberíamos pensar. Cuando la rutina es la excusa … malo. Pilar sigue diciendo….
Y por último, la ilusión es una actitud que reside en todos nosotros. Nacemos con ella, por lo que simplemente, hemos de aprender a recuperarla. Los niños son unos buenos maestros en este camino y recuperar nuestras sensaciones amables de nuestra infancia o nuestra adolescencia, cuando nos dejábamos sorprender por todo cuanto nos sucedía, es un buen camino para aprender a ser felices ya de mayores.
Ya lo comenté en otros post, si de algo puedo presumir es de querer… ser feliz… y de tener ilusión por serlo y he descubierto… que incluso hacer feliz.
Conclusiones
Mi perseverancia es inata, mi ilusión una característica pero, también mi obcecación y obsesión, hasta el punto de lastimarme. Lo noto cuando corro, cuando pienso y sobre todo cuando amo. Mi capacidad de análisis y estrategia me brindan demasiadas oportunidades y alternativas para poder conseguir mi sueño. Espero que al final .. no me pase factura y no tenga la sensación que me he lastimado demasiado. Defiendo lo que creo, incluso a menudo con vehemencia,( ni el mindfulness ha podido) sueño en lo que creo y quiero y es por eso que me ilusiono con lo que sueño y eso; me hace feliz. No está siendo fácil, duele, pero aún me hace feliz. Prefiero ser así que subsistir sin sentido.
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